Divorcio

🚨 Intermedios

El impacto en la región, con el "divorcio" empresarial entre Cristóbal López y Fabián De Sousa: cómo se repartirán las empresas y el impacto en Comodoro y la Patagonia.

La separación y en juego están medios como C5N, El Patagónico y Radio 10, obras clave como el Estadio del Centenario y la del Shopping Costanera, el restaurante In, desarrollos inmobiliarios, empresas energéticas y alimenticias, entre otras.


El impacto en Comodoro y la región será clave en un contexto de parálisis de la obra pública.

El divorcio empresarial entre Cristóbal López y Fabián De Sousa: cómo se repartirán las empresas y el impacto en Comodoro y Chubut

La separación societaria entre Cristóbal López y Fabián De Sousa fue confirmada por fuentes cercanas al holding empresarial. Aunque aún no se formalizó mediante firmas, el proceso legal de reasignación de activos y tareas ya está en marcha.

Por un lado, Cristóbal López mantendrá la marca Grupo Indalo y los activos que quedarán bajo su órbita. Por el otro, la nueva sociedad quedará conformada por Fabián De Sousa, Nacho Vivas y Julián Leunda, quienes conservarán parte de las empresas del grupo original.

Entre los activos en juego se encuentran medios de comunicación como C5N, Radio 10, Ámbito Financiero, MinutoUno, El Patagónico y varias FM de alcance nacional, así como el restaurante In de Rada Tilly, desarrollos inmobiliarios en Comodoro y la villa balnearia, hoteles, empresas constructoras, de energía y de alimentos.

Una de las empresas involucradas, la constructora CPC, que estará a cargo de Cristóbal López, tiene a su cargo importantes obras en la región que permanecen paralizadas. Entre ellas, el Estadio del Centenario, cuya reanudación está sujeta a la aprobación de un presupuesto de más de 1.000 millones de pesos en el Concejo Deliberante. Aun si se aprueba, sólo se avanzaría con el techado, y la finalización quedaría en manos de una eventual concesión a una empresa privada.

CPC también era responsable del tramo más largo de la autovía Rada Tilly–Caleta Olivia, abandonado tras la decisión del gobierno nacional de suspender la obra pública, salvo casos excepcionales. También están paralizados los trabajos en la repotenciación del acueducto, que registra un avance del 50%, pero no es prioridad en la agenda nacional y será asumido parcialmente por el gobierno provincial.

En contraste, hay dos proyectos que aún tienen continuidad asegurada: el azud derivador del Lago Fontana, una pequeña represa sobre el río Senguer, y la planta de tratamiento de efluentes cloacales de Rada Tilly, ambas con compromiso de financiamiento por parte del gobierno nacional.

En el plano mediático, el grupo controla señales de fuerte presencia nacional como C5N y Radio 10, además de Ámbito Financiero, Buenos Aires Herald, MinutoUno y las FM Mega, Pop, Vale y One. En Comodoro, continúa operando el diario El Patagónico.

En paralelo, forman parte del reparto empresas como Inversora M&S, compañías aseguradoras, el restaurante In, y desarrollos inmobiliarios como el Shopping Costanera que quedaría en manos de Fabián De Sousa. 

También, la planta de Alcalis de la Patagonia (ALPAT) en San Antonio Oeste, que produce carbonato de sodio, clave para la industria del litio, y empresas como La Salamandra, dedicada a alimentos, y Pilgrim, con operaciones en petróleo, gas y litio. Esta última figura entre las interesadas en áreas recientemente devueltas por YPF en Santa Cruz.

En el caso de ALPAT, la empresa atraviesa una delicada situación financiera, agravada por el alto costo del gas y la caída de ventas por la apertura de importaciones. Recientemente, el gobierno de Río Negro anunció una asistencia de u$s 3 millones para sostener su operación y evitar despidos, en un intento por mantener la paz social y garantizar los más de 400 empleos directos que dependen de la planta.

El Grupo Indalo fue fundado en 1999 y alcanzó su auge entre 2010 y 2015, cuando llegó a facturar más de 17.000 millones de pesos y emplear a más de 3.000 personas de forma directa. Sin embargo, su situación cambió drásticamente durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando López y De Sousa fueron investigados por supuesta utilización indebida del impuesto a la transferencia de combustibles (ITC) para financiar su expansión. Ambos fueron detenidos y luego absueltos, aunque la causa aún espera resolución final por parte de la Corte Suprema.

El Grupo Indalo fue fundado en 1999, hasta hace poco, De Sousa estaba a cargo de la gestión operativa del grupo, incluyendo los medios, mientras López ocupaba un rol más reservado. La reconfiguración actual redistribuye roles y activos, Cristóbal López mantiene los activos más rentables y mediáticos bajo la marca Indalo, mientras que De Sousa, junto a Vivas y Leunda, apunta a la diversificación con foco en minería, alimentos e inmuebles.

Este divorcio marca no solo el fin de una sociedad empresarial emblemática surgida en Comodoro Rivadavia, sino también el comienzo de dos estrategias diferenciadas para sobrevivir y eventualmente crecer, en un país en crisis.

Por ADN Sur

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